José Agustín Sánchez (JAS), compositor, pianista y maestro director orquestal de ascendencia venezolana, personifica una odisea de prodigiosa musicalidad que abraza su vida desde sus más tiernos años. Su inquebrantable vínculo con el arte sonoro lo encauzó hacia las vertientes de la música clásica bajo la tutela de insignes maestros como el fundador del Sistema de Orquestas y Coros de Venezuela, el Maestro José Antonio Abreu.
En el umbral de la adolescencia, JAS alcanzó la trascendencia al recibir una beca que le permitió proseguir su peregrinaje artístico en el Reino Unido, nutriendo su esencia en Cambridge y luego en el Atlantic College de Gales. Durante este periodo formativo, abrazó la milenaria tradición artística que se despliega desde el legado de Franz Liszt, forjando así su propio lenguaje compositivo mientras las corrientes culturales europeas se impregnaban su partitura.
Su talento atrajo la atención de la Universidad de Bard College en Nueva York, que lo agasajó con una beca presidencial para continuar con sus estudios como compositor y director orquestal. Estados Unidos se convierte en el escenario que expandiría su visión artística, fomentando innovadores procesos creativas que destacaran su trabajo musical.
En el año 2011, JAS efectuó su primer periplo africano, punto de partida para la gestación de su obra sinfónica prima, "Amazónica". Este viaje lo guió a través de las exóticas tierras de Ruanda, Kenia y la República Democrática del Congo, inmiscuyéndose en sus realidades para orfebrar una composición que entrelaza la esencia humana con la naturaleza y los fundamentos primigenios de la música. El viaje culminó en una epopeya artística en la majestuosa Gran Sabana venezolana, donde fusionó con destreza elementos del folklore de las comunidades indígenas y las raíces de su patria en su sinfonía. En el 2012, por solicitud del Maestro Abreu, el Sistema de Orquestas y Coros estrenó esta obra en la Sala Simón Bolívar del CASM, en Caracas.
En el 2013, al culminar sus estudios académicos en la Universidad Bard College, JAS recibió el prestigioso galardón de la Thomas J. Watson Foundation, siendo el primer artista venezolano en lograr tal distinción. Durante ese mismo año, su obra "Mania" debutó en Nueva York a cargo de la American Symphony, al tiempo que "La Leyenda del Silbón" fue premiada en el primer concurso de composición de Venezuela. Estas obras impulsaron una nueva travesía que llevó a JAS a explorar un nuevo continente, el Asia. Su andanza comenzó en China, escenario que lo guió por los míticos senderos de la Ruta de la Seda, los icónicos templos budistas y las enigmáticas ciudadelas perdidas del sureste asiático, desplegándose ante la grandeza de los paisajes del altiplano tibetano y alcanzando las cumbres del Himalaya, hasta llegar al mismo Everest. Fue aquí donde concibió su obra "5 Discursos de Paz". Estas experiencias lo sumergió en las milenarias culturas orientales que despertaron en él una senda espiritual que lo marcaría por siempre.
En el 2014, tras su regreso a América desde el lejano Oriente, Nueva York se convirtió en un escenario de conflictos internos para el inquieto viajero. Desilusionado con la propuesta académica tradicional, JAS declinó tentadoras ofertas para continuar con un doctorado en Nueva York. En lugar de ello, optó por un nuevo viaje introspectivo que lo traería de vuelta a sus raíces en América del Sur y concebir las futuras joyas de su repertorio.
En el año 2017, la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas lo nombra Compositor Residente de la institución, encomendándole la creación de una obra sinfónica. JAS emprende una travesía denominada "Sonidos del Sur", que lo llevó a través de cinco países: Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela. Durante este periplo sus procesos creativos transmutan en forma de Ofrenda Musical la cual lo llevaría a recorrer impresionantes escenarios de diversos ecosistemas de gran importancia en el continente. Estas ofrendas desarrollan en él una tremenda capacidad de autogestión y emprendimiento, al mismo tiempo que logra vincularse con las realidades sociales, políticas, ambientales y espirituales que atravesaban el continente.
El recorrido de JAS culmina en una obra que tituló "Los Cantos del Sur" pero tras su retorno a Venezuela para el estreno mundial, la pandemia por Covid-19 paraliza al mundo. Es en este punto donde su trayectoria cobraría un sentido aún mayor, transformando su Ofrenda Musical en una impactante Desinfección Musical que desarrolló durante los meses de confinamiento. Sus composiciones las denominó Vacunas Musicales y las llevó a decenas de hospitales y centros de Covid-19 para aplicarlas a los pacientes infectados en formatos de terapias musicales. Su iniciativa demostró las propiedades sanadoras que posee la música, documentando numerosos testimonios de pacientes que sanaron con sus composiciones. La Desinfección Musical se convirtió en objeto de estudio, vinculando el Arte con la Ciencia como aporte a la realidad apocalíptica que atravesaba la humanidad. En el 2021, el VI Congreso de Investigación, Desarrollo e Innovación de Panamá IDI-UNICyT publica los resultados de estos estudios científicos. A finales de ese mismo año, su obra sinfónica "Los Cantos del Sur" es finalmente estrenada por la Orquesta Municipal de Caracas en el Teatro Municipal de la capital venezolana.
En el 2022 JAS continúa su periplo por el continente Sur Americano. Su Ofrenda Musical lo llevan a desarrollar una serie de expediciones artísticas innovadoras que impulsan su camino hacia nuevos ecosistemas planetarios como el Macizo Guayanés, los Tepuyes Roraima y Woipan, el río Amazonas, los Lençois Marhanenses, la cuenca del Paraná, las Cataras de Iguazú y la Tierra de Fuego. En el 2023, decide continuar su travesía más allá del fin del mundo, hacia el continente blanco de la tierra, para llevar su Ofrenda Musical a escenarios inexplorados por el arte y hacerla grito de reflexión ante los retos climáticos que atraviesa la humanidad. Con esta intención, logra cruzar el canal de Drake en un velero para embarcarse en una nueva expedición que lo llevarían a navegar por la Antártida. Fue así como JAS se convierte en el primer artista en presentar su musica sobre la superficie de un iceberg flotante, documentando una vinculación inédita con la fauna y el campo magnético del continente blanco.
En síntesis, la trayectoria de JAS se erige como una búsqueda incesante de inspiración y sabiduría, desplegando un relato único que redimensiona el papel del arte en el desarrollo holístico de la humanidad. Su música y su peregrinaje se entrelazan para forjar una voz influyente que definen el aporte artístico de José Agustín Sánchez al mundo.